MADERAS

 Estas son algunas de las maderas de uso más comunes en el mercado. Es una lista incompleta que actualizaré constantemente.

Algarrobo: Tiene escasas vetas y es durable a la intemperie. Se usa en construcción de toneles, muebles rústicos y pesados. Se oscurece con el paso del tiempo.
Anchico: Es dura y pesada de color castaño rosado que se oscurece con el tiempo. De gran utilidad en contacto con el suelo. Se usa para carpintería rural, marcos de puertas y ventanas, parquets, postes, etc. Es la mejor leña porque produce mucho calor y poco humo.
Cedro: De color castaño oscuro y brillo dorado suave. Madera liviana a semipesada, fácil de trabajar, por lo que se pule bien, adquiere muy buen lustre y no tiene problemas de secado y estacionamiento. Tiene muchisimos usos debido a su nobleza.
Guatambú amarillo: Madera de buena calidad, semipesada y dura de color amarillo - ocre. Se la utiliza en la confección de muebles finos, instrumentos de ingeniería y reglas.
Guatambú blanco: De color blanco - crema uniforme, con una textura fina, homogénea, suave y delicada. Utilizada para enchapados, terciados y mueblería fina. Es dura y ofrece dificultades para el clavado.
Incienso: Madera muy preciada. De hermoso veteado y aroma. De color castaño claro o castaño rojizo oscuro, es pesada, dura, fuerte y resistente. Se usa en mueblería y ebanistería fina, a la intemperie en escaleras y marcos de puertas y ventanas, revestimientos exteriores, etc.
Jacarandá: Madera semidura y semipesada, es apta para la construcción de muebles, revestimientos y carpintería en general.
Lapacho: Es muy resistente a la intemperie por ser madera muy dura y pesada. Mayormente utilizada para la construcción de pisos y parquets.
Lenga: Madera pesada, fuerte y semidura. No le afecta la intemperie. Se usa para la construcción de estructuras,  postes, toneles, industria naval, parquets, mueblería y carpintería en general.
Nogal: De buena calidad, por lo que se la utiliza en mueblería fina y enchapados. Es dura y pesada de color pardo-grisáceo.
Palo blanco: Madera de textura fina, pesada y homogénea, casi sin veteado. Usado para la fabricación de reglas, escuadras, argollas, mangos de paraguas, piezas de ajedrez, palos de escoba, plumeros, pisos,etc.
Palo santo: Es de las maderas más pesadas y duras. Decolor blanco amarillento y tonalidades castaño - claras, se la usa para bastones, cofres, manijas, pedestales, ceniceros y adornos en general.
Peteribí: Madera de color parduzco con tintes amarillentos. Tiene un veteado jaspeado pronunciado y brillo natural suavemente dorado, que lo convierte en una madera de alto valor decorativo para muebles finos, enchapados y revestimientos. Es liviana a semipesada, de buena estabilidad y semidura.
Pino blanco: Es una madera blanda y liviana de color blanco amarillento. Usada en muebles y carpintería en general de amplias aplicaciones y muy difundida.
Pino paraná: Es blanda y liviana, de color blanco amarillento y se oscurece con el tiempo. Muy popular y de amplísimas aplicaciones en carpintería.
Quebracho colorado: Tiene un veteado suave y hermoso, pero es muy dura y de difícil trabajabilidad, por lo que se la usa para permanecer en contacto con el agua en postes, bases de columnas, tranqueras, durmientes de ferrocarril, etc.
Roble: Tiene un veteado muy marcado y llamativo de color amarillo - ocre. Una de las mejores maderas para trabajos de ebanistería, mueblería fina, enchapados, revestimientos interiores, etc. No tiene problemas de rajaduras, deformaciones ni manchas por humedad.
Tipa: Madera moderadamente pesada, semidura y de color blanco-amarillento con un veteado en forma de espigas. Usada para muebles, enchapados, terciados, artículos para deportes, etc. Es muy fácil de trabajar.
Viraró: Es una madera bastante pesada y semidura. Se la utiliza en trabajos de curvado para fabricación de sillas de estilo y muebles finos. Es resistente y durable aunque no resiste la humedad por mucho tiempo. Su color varía del rosado pálido hasta el rojo-violáceo. Muy usado en pisos y trabajos de tallas y molduras.

Eduardo O. Zabatta

Volver alíndice de La casa de paja - Volver al índice de Biohábitat