Nombres
que recibe esta planta:
Latín:
Crocus sativus L.
Castellano:
azafrán.
Catalán:
safrá.
Vasco:
azaparan, hupa.
Gallego
y portugués: açafrao.
Francés:
safran.
Inglés:
saffron.
Holandés:
saffran.
Alemán:
Safran.
Italiano:
zafferano, croco, grogo, grotano.
Familia:
iridáceas.
Originario:
de la mitad oriental de la cuenca mediterránea.
Donde
encontrarlo: España (Murcia, Alicante, Valencia).
Parte
utilizada medicinalmente: los pistilos de las flores.
Tipo:
pequeña planta bulbosa perenne, de 10- 30 cm de altura. El bulbo
es carnoso, redondeado, con base aplanada, blanco por dentro y cubierto
de capas fibrosas que surge cada.
Hojas:
estrechas, radicales, lineales, acanaladas, flácidas y revolutas
por el margen; están rodeadas en su base por numerosas fibras envolventes
membranosas.
Flores:
grandes, envueltas por dos brácteas membranosas, axilares, casi
sesiles y de un color violeta o púrpura- violáceo. El estilo
es largo y se divide en tres estambres muy olorosos, de color anaranjado
intenso. Se abren a partir de octubre sobre un tallo leñoso y algo reseco, llamado
el espartillo que mide entre dos y cuatro
cm. Sus pétalos delicados poseen tres estambres
y cuya delicadeza requiere una cosecha a
mano cuado todavía está en capullo y antes
de la salida del sol.
Fruto:
es una cápsula con tres celdas en su interior, que contienen numerosas
semillas redondeadas.
Componentes
y principios activos:
Aceite
esencial (0,4- 1,3 %)
·
Safranal.
·
Cineol.
·
Pineno.
Glucósidos.
·
Alfa, beta y gamma protococina.
·
Picrocrocina (4%).
·
Heterósidos amargos
.
Pirocrocósido.
·
Crocósido.
·
Safranal.
Pigmentos
·
Crocina.
·
Licopina.
·
Zeaxantina.
·
Caroteno.
·
Licopeno
·
Crocetina.
Aceite
fijo (8- 13%)
Gomas
(4%)
Propiedades
medicinales:
Estomáquico.
Carminativo.
Emenagogo.
Aromático.
Colorante.
Embriaguez
Indicaciones
terapéuticas:
Afecciones
ginecológicas.
Afecciones
digestivas.
Enfermedades
infecciosas (diaforético y estados febriles).
Dentición
infantil.
Condimento
alimenticio.
Preparaciones:
Infusión:
2- 4 g por litro de agua.
Polvo:
300 mg como carminativo; 0,5 a 1, 5 g diarios como emenagogo.
Tintura:
2 a 5 g diarios.
Tintura
madre homeopática: 30 gotas, tres veces al día.
Jarabe
de azafrán: 3º g de pulpa de tamarindo, 3 a 5 g de azafrán,
200 g de miel, 100 g de agua. Se hierve el tamarindo con el agua hasta
que se deshaga la pulpa. Se quita la espuma de la superficie y se añade
el azafrán, y cuando esto se enfría, se añade la miel.
Sirve para la apicación en las encías en la época
de dentición, unas tres o cuator veces al día.
Apunte
de interés:
Virgilio
utilizó el término Crocus que deriva del griego y significa
“el hilo de un tejido”.
Dioscórides
resalta en sus apuntes: “Toda suerte de Açafran es especie de hortaliza:
dado que en toda Italia, por ser muy lleno de humor y de color gratioso,
usan de el para teñir las salsas, por el qual respecto se vende
caro. Es muy util a cosas medicinales. Fue opinió de Thesalo, que
el Açafran no tenía otra virtud, sino ser oloroso. Otros
dizen que bevidas tres dracmas del, matan. Su virtud es madurativa, molificativa,
y un tanto estiptica. Provoca mas desto la orina, y da buen color al rostro.
Estimula el Açafran la luxuria, y aplicado en forma de emplastro,
mitiga aquellas inflamaciones, que tienen algo del fuego de Sant Anton”.
El
azafrán como especie, es un producto caro porque para recoger 1
kilo, es necesario recolectar 100.000 flores. Es preferible recolectar los pétalos
en luna llena o días cercanos. Una vez se
ha recolectado. se deshoja para separar
los preciados hilos empolvados que se depositan
sobre unas planchas especiales denominadas
ciazos y se tuestan a fuego lento. Posteriormente
se guardan en frascos con cierre hermético
y se protegen de la luz y la humedad. En
España el azafrán más apreciado es el de
Castilla La Mancha.