Al
Abuelo (Je!), Susa,
Loyola, de EcoSalvia,
por su valentía en dejar de servir al sistema y aventurarse
en la alternatitva de una vida autosuficiente con la Madre Tierra,
y sin los cuales no hubiese sido posible este cd escrito
por todos los componentes de EcoSalvia.
Siempre
hay que saber estar agradecido en la vida a las inpiraciones
ajenas, aquellas que te llegan con una sencilla visita de aquellos
amigos que hacía tiempo que no veías, o a aquellas personas
que sin buscarlo motivan tus deseos de realizar algo que duerme
en tu interior.
De
las muchas personas que han conocido mi trayectoria, especialmente
mi relación con la madre tierra, quiero agradecer de todo corazón
lo importante que fueron para mí y para la edición de este
cd las que menciono a continuación, consciente de que todas
aquellas que no figuren sus nombres sabrán perdonármelo, pues
también pusieron su grano de arena en esta obra.
A
Montse Solá, por
su paciencia y amor en mis peores momentos en la isla de Ibiza,
por su constancia y sus ánimos, y sobre todo por creer en mis
proyectos.
A
mis 4 hijos: Daniel,
Abraham, Sara y Gabriel,
que crecieron siempre en contacto con la tierra y experimentaron
una vida siempre repleta de los regalos de un huerto vivo
A
Fernando Cabal,
por animarme siempre a crear este cd.
A
Carmen Cura,
por reconciliarse conmigo después de muchos años justo al inicio
de este cd.
A
Brisa
de Sevilla, por mantenerme siempre tan refrescado
A
Juanito
de Las Dalias, por confiar siempre en mis proyectos con la tierra
y por cambiar de métodos, cultivando con agricultura biológica
en Ibiza.
A
mi querida Madre Tierra
sin la cual no habría ni cd, ni vida en este castigado planeta
aún azulado.
Joan Sisa (EcoSalvia)